Antes de que vuelvas a trabajar o estudiar, empieza a planear cómo te vas a sacar la leche.

• Habla con tu empleador o el personal donde estudias sobre el apoyo a la disposición de mamás que quieren sacarse la leche.
• Pídeles un lugar privado que no sea el baño. Pregunta si tiene enchufe.
• En el trabajo, habla sobre el tiempo razonable que necesitas cada vez que te saques leche.
• Lee esta información sobre tu derecho a sacarte leche en el trabajo.

Empieza a sacarte leche por lo menos dos semanas antes de volver a trabajar o estudiar para que puedas congelar leche materna con tiempo.

Extraer leche en CASA

• Algunas mujeres pueden extraer leche materna sin usar una bomba eléctrica.
• Si usas una bomba, busca la más adecuada a tus necesidades. Llama a la oficina local de WIC para más información sobre cómo obtener una bomba.
• Dos semanas antes de volver a trabajar o estudiar, extrae leche con una bomba por lo menos dos veces al día para guardarla y usarla cuando vuelvas.
• Trata de usar la bomba una vez en la mañana cuando te despiertes y nuevamente antes de acostarte. Sigue amamantando a tu bebé cuando pida. ¡Tendrás suficiente leche!
• Guarda la leche que te saques en el congelador para que la uses los primeros días de trabajo.

Extraer leche en el TRABAJO/ESCUELA

• Cuenta las veces que tu bebé toma el pecho durante las horas que trabajas o estudias típicamente. ¡Esto te dará una idea de cuántas veces tendrás que sacarte leche cuando vuelvas a trabajar o estudiar!
• Considera sacarte leche de 15-20 minutos cada vez y calcula tiempo extra para prepararte y lavar las partes de la bomba.
• Ponle fecha a la leche que te saques y refrigérala para su uso al día siguiente.
• Si no hay un refrigerador en el trabajo o la escuela para que guardes la leche, ponla en una bolsa que tenga aislamiento con compresas frías.
• Habla con la persona que cuida a tu bebé sobre cómo preparar de manera segura la leche materna que guardes. (Además, lee la información abajo sobre cómo almacenar la leche materna.)

Cambios pueden ser difíciles…

• ¡Estás haciendo un gran trabajo al asegurarte de que tu bebé tome leche materna mientras no está contigo!
• Sigue dándole el pecho cuando estés con tu bebé para asegurar que ambos disfruten ese vínculo especial y el tiempo que pasan juntos. Esto también ayuda a que ¡tengas mucha leche!
• Mirar fotos o videos, u oler algo con el aroma de tu bebé puede ayudar a que te salga la leche.
• Y recuerda: incluso una pequeña cantidad de leche materna es beneficiosa. Si estás teniendo dificultades o te parece que no estás extrayendo suficiente leche para alimentar a tu bebé, por favor, llama a la oficina de WIC para hablar con una de nuestras especialistas en lactancia.

Si estás sacándote leche materna para que tome tu bebé mientras no están juntos, es importante saber cómo guardarla y prepararla de manera segura. También puedes compartir estas recomendaciones y consejos con quienes cuidan a tu bebé.

Comenzar LIMPIO para mantener la leche materna segura

• Al guardar y preparar la leche materna, la seguridad empieza con manos limpias.
• Lávate las manos antes de sacarte leche y de preparar el biberón con leche materna para guardarlo o usarlo.
• Asegúrate de que los biberones, chupones y todas las partes de tu bomba estén limpias y desinfectadas.
• Usa biberones y chupones sin BPA para tu bebé.

Consejos sobre almacenaje

• Puedes guardar tu leche en contenedores limpios sin BPA, bolsas o cubeteras.
• Ponle fecha a la leche que te saques y refrigérala para su uso al día siguiente. Si la leche materna se va a guardar más de una semana, métela al congelador con fecha. Debes ponerla en la parte trasera del refrigerador o congelador, para evitar que la temperatura varíe si se abre la puerta con frecuencia.
• Para asegurarte de usar la leche que tiene más tiempo, usa primero la que te sacaste primero.
• Estas recomendaciones se aplican a los bebés saludables que no fueron prematuros:

Preparación

No tienes que calentar los biberones que han estado refrigerados, pero a algunos bebés no les gustan fríos. Si optas por calentar la leche materna que guardaste, sigue estos consejos:

• ¡Nunca uses el microondas para calentarle la leche materna a tu bebé! Puede destruir nutrientes en la leche y hace que parte de ella se caliente demasiado, lo que le puede quemar la boca a tu bebé.
• Para calentarla, pon el biberón o la bolsa de leche en un tazón o vasija con agua tibia. Esto permite que el biberón o la bolsa de leche materna se caliente gradualmente. Otro método es poner el biberón bajo la llave de agua tibia y darle vueltas lentamente. Esto también ayuda a mezclar la leche, pues es posible que se haya separado cuando estaba guardada. Es normal.
• Sabrás que la leche está lista para tu bebé cuando al dejar caer unas gotitas en tu muñeca, la sientas tibia, no caliente.

¿Más preguntas?

Llama a tu oficina local de WIC y ¡pide hablar con una de nuestras especialistas en lactancia! También puedes encontrar más información aquí. 

Si quieres que tu bebé que toma pecho empiece a usar un biberón, quizá sea bueno esperar hasta que amamante bien (a las 3-4 semanas de edad). Si empiezas a usar un biberón antes, tu bebé puede tener dificultades para aprender a amamantar.

Si tu bebé no amamanta bien durante las primeras semanas, tal vez sea necesario que empiece a tomar del biberón. Pide ayuda si estás teniendo dificultades amamantando. ¡Estamos aquí para ayudarte!

Los chupones de biberón vienen en muchas formas. Cada bebé es diferente y por eso no existe un tipo de biberón y chupón ideal para todos los bebés. Quizá tengas que probar varios tipos de biberón antes de encontrar el adecuado para tu bebé. En general, escoge un chupón de flujo lento y que se agrande gradualmente desde la punta hasta la base. Esto permite que tu bebé pueda prenderse bien.

Ritmo de la alimentación con biberón

La alimentación con biberón debe ser a un ritmo que permita que tu bebé coma lentamente, al mismo ritmo natural que la leche materna. Así permites que el bebé tenga más control del ritmo con que toma el biberón. El objetivo es hacer que el flujo de leche sea más lento, para que tu bebé tenga periodos de descanso y coma más despacio.

• Carga a tu bebé de manera que esté sentado con la espalda casi recta (en vez de echado) y si es necesario, sostenle la cabeza y el cuello.
• Cuando veas indicios de hambre, tócale los labios suavemente con el chupón del biberón y espera a que abra bien la boca. Asegúrate de que se prenda bien del chupón del biberón.
• Sujeta el biberón de manera horizontal[SC6] para empezar (todavía no hay leche en la punta del chupón).
• Deja que el bebé empiece a aspirar, luego inclina un poco el biberón para que entre un poco de leche a la punta del chupón.
• Deja que el bebé aspire y ingiera 3-5 veces (20-30 segundos), luego inclina hacia abajo el biberón para que tu bebé descanse.
• Cuando tu bebé vuelva a empezar a aspirar, inclina el biberón un poco hacia arriba para permitir que vuelva a entrar leche al chupón.
• Repite el proceso, con interrupciones para que tu bebé descanse y vuelva a empezar a aspirar para controlar el ritmo con que toma. Sigue alimentándolo hasta que parezca que está lleno (vez que deja de aspirar después de un descanso, se voltea o se aparta del chupón).

Si tu bebé no quiere tomar del biberón

Algunos bebés que toman pecho aceptan el biberón fácilmente y otros no. Si tu bebé lactante no está dispuesto a tomar del biberón, quizá estas sugerencias sean útiles.

• Haz que otra persona le dé el biberón.
• Ofrece el biberón antes de que tu bebé tenga mucha hambre.
• Ofrece un poquito de leche (1 onza) en el biberón para practicar.
• Trata de ofrecer el biberón cuando tu bebé tenga sueño.
• Trata diferentes tipos de biberones y chupones.
• Trata de cargar a tu bebé en otra posición cuando le des el biberón.
• Ofrece el biberón varias veces (una vez al día o por lo menos varias veces por semana).